¡Mamá! ¡Hay algo debajo de mi cama! (o "¿Qué pasó con el terror?)

A mi toda la vida me gustó el terror. Las pelis, los libros, las leyendas urbanas que pasan de boca en boca, en fin, me gusta en todas sus expresiones. Asumo que todo comenzó cuando yo tenía 5 años y mi padre nos agarró a mi hermana, mis dos primos y a mí y nos dijo: "alquilé una peli para ustedes, tiene un payasito en la tapa". -Aquí cabe hacer un paréntesis. Mi padre jamás tuvo el estadio completamente iluminado, mi padre era una de esas personas que creía que era una gran idea pagar la fianza de su amigo golpeador y llevarlo a cenar a casa con sangre ajena aún en la camisa. Ahora que aclaré esto, puedo proseguir.- Bueno, como todos a esta altura sospecharán, la pelicula que trajo fué It. No, no me voy a hacer el radical y decir que la re disfruté y que la sangre alimentaba mis deseos oscuros. No. Esa noche no dormí y por varias semanas tuve muchísimas pesadillas. De hecho, es al día de hoy que no puedo ir al baño sin descorrer la cortina de la bañadera. A los 7, mi viejo (que ya lo hacía por amor al arte), se fué al funeral de su madre y nos dejó a mi hermana y a mí Martes 13 en la tele. Los años pasaron y, a pesar de los traumas que me quedaron, las historias de terror me llamaban cada vez más la atención. Leí muchos libros y ví centenares de películas. Pero nunca creí que el terror podía llegar tan bajo como llegó hoy. Debo admitir que a la hora de ver la peli que ya les voy a nombrar, no le tenía nada de fé, pero esperaba al menos reírme de ella. Pero no pasó. No, señor, usted no se va a divertir, me decía la peli mientras avanzaba. Esta obra maestra de lo que no hay que hacer en el cine se llama "The Human Centipede 2". A ver, comencemos... Si tengo la facultad de ver en colores... Por qué, señor director, no saca provecho de eso? Dígame! Dígame y me corto las venas AQUÍ MISMO!
Sigamos... Por qué tengo que verle un huevo al gordo? Ya no tuve suficiente viendo cómo transpira alquitrán y cómo sus ojos inyectados en sangre y pedofilia miran para todos lados? No, usted no ha tenido suficiente, de hecho, aquí le va más: LE TUVE QUE VER EL PENE ERECTO LLENO DE CACA Y GOTEANDO! Cuál es el motivo de todo esto? Que alguien me diga por el amor de Sonic! Díganme, por favor, en qué mundo es considerado terror eso? El tipo intenta imitar al doctor de la peli, pero ni siquiera es doctor! Señor, psss, hey, señor... No tiene las herramientas, señor... No puede pegar a la gente con cinta aisladora, señor... Hey... Psss... Y no, no hubo caso, la película no hacía más que decaer cada vez más... Lo que me lleva a lo siguiente... Dónde quedaron las historias que te mantenían atrapado y al borde del asiento? Dónde quedaron esas películas que te daban pesadillas o que no te dejaban salir de tu habitación si todas las luces estaban apagadas? Ya no quiero ver más chinitas con el pelo en la cara, no quiero ver más "experimentos erróneos" que salen a clamar venganza! Ya no quiero más películas conceptuales que tienen el final más abierto que el ano de Jenna Jameson y que dejan el final "al criterio del espectador". Yo me senté acá a que me cuentes una historia. Si quiero pensar, estudio, leo un libro, hago un crucigrama... El mundo decae y somos nosotros los que dejamos que eso suceda... Caso contrario, díganme por qué American Horror Story va a hacer una segunda temporada? Esa serie no debería haber llegado al segundo capítulo. Está llena de clichés, situaciones predecibles, pésimas actuaciones y trucos de cámara tan malos que sólo te hacen reír. Y yo me pregunto... Por qué, Wes Craven, por qué, Stephen King, os quedáis de brazos cruzados? No conocen alguna maldición antigua que termine con este sufrimiento?
Es terrible, pero el terror más grande que voy a sufrir, según parece, es seguir coexistiendo con esta clase de películas.
Bitácora del Capitán pelotudo N°3
*spoiler alert* Y recuerden, si un gordo los secuestra y les cose su boca al culo de otro, traten de no estar al último, porque el gordo se los va a cojer. *spoiler alert*